viernes, 22 de mayo de 2009

Varg Vikernes en libertad

Varg Vikernes (a.k.a. Conde Grishnackh), el cerebro detrás de BURZUM, que fuera declarado culpable de asesinar al guitarrista de MAYHEM Oystein Aarseth (a.k.a. Euronymous), en Agosto de 1993, y de prender fuego tres iglesias, es ahora un hombre libre.

"Puedo confirmar que he sido liberado de prisión", declaró Vikernes al diario Dagbladet de Noruega. Aunque su solicitud de libertad condicional fue denegada en cuatro ocasiones, siendo la más reciente en Septiembre de 2008, Vikernes fue informado en Febrero de este año que iba a ser puesto en libertad tras cumplir casi 16 años de prisión. Finalmente fue autorizado hace un par de semanas, según Dagbladet.

"Voy a tener que informarme [a las autoridades] durante un año” continúa Vikernes, “al principio cada dos semanas y luego una vez por mes". Durante los últimos dos años, Varg tenía el permiso de salir de prisión periódicamente para caminar alrededor de Tromsø, Noruega (donde se encuentra la prisión) y visitar a su familia.

El año pasado se supo que funcionarios del Ministerio de Justicia Noruego, que llevan adelante este caso, temen que Vikernes sea incapaz de adaptarse a la vida en el exterior luego de sus años en prisión. "Estoy listo para la sociedad, y lo estuve durante muchos años", dijo Vikernes al mismo diario en Julio del año pasado. "He aprendido de mis errores y ya soy más grande. Ahora sólo quiero estar con mi familia". Y añadió: "Mi mente nunca ha estado en prisión, todo el tiempo pienso sobre lo que voy a hacer el día que esté en libertad”.

"Apenas he visto a mi hijo desde que vino al mundo. A pesar de que he escuchado su voz en el teléfono casi todos los días, es muy difícil no estar presente mientras él está creciendo”.

"Extraño a mi familia y espero el día en que pueda trabajar en mi granja, crear música, escribir libros y estar todo el día con mi esposa e hijos y vivir una vida normal”.

En otras declaraciones hechas el año pasado a la página Varden.no, Vikernes dijo "Como respeto a los demás, quiero que los demás me respeten. Somos gente común y corriente, y no queremos mayor atención que la que pueda tener cualquier otra persona".

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